Don Pascual Chávez Villanueva, Rector Mayor de la Congregación Salesiana y 9º Sucesor de Don Bosco fue testigo de excepción de la Coronación Pontificia de María Auxiliadora, en la ciudad hermana de Córdoba el pasado domingo.
Según una bonita crónica de nuestro buen amigo Miguel Ángel Moreno Nuño, SdB, Delegado de Comunicación Social de la ISMA Inspectoría Salesiana María Auxiliadora, con sede en la ciudad de Sevilla. Que comenzaba así:El prodigio de 1908 se ha repetido hoy en Córdoba. Las crónicas contaban que el cielo se abrió de par en par el día en que la imagen de María Auxiliadora era bendecida, tras un día lluvioso que presagiaba lo peor. El peral florido espontáneamente fue también entendido entonces como un signo de lo alto. Ciento un años después, un cielo cubierto de nubes y amenazante de lluvia en la jornada del pasado sábado se transformó minutos después de la coronación pontificia de la imagen de María Auxiliadora, en un azul que irradiaba alegría y júbilo por todas partes. La misma alegría que se veía en los rostros de los muchos miles de cordobeses y devotos de todas partes -las cifras bailaban y nadie se atrevía a dar una cantidad definitiva- que abarrotaban el bulevar del Gran Capitán.
Verdaderamente se habla de unas 8000/10000 personas aproximadamente, las que se congregaron allí, para asistir a la Coronación Pontificia de la Madre de Jesús, bajo una de las advocaciones más extendidas, como es la de María Auxiliadora de los Cristianos. Personas devotas tanto de Córdoba, como de todas partes no se quisieron perder este acontecimiento.
Se habían colocado unas 5500 sillas en el Bulevar del Gran Capitán, pero testigos presénciales me comentaban ayer que había por lo menos otras 3000 personas en pié y expectante a un pontifical, presidido por el Arzobispo Coadjutor de Sevilla y Administrador Apostólico de la ciudad hermana de Córdoba. Monseñor Juan José Asenjo Pelegrina.
Testigo de excepción de esta coronación ha sido el Rector Mayor de la Congregación Salesiana, Don Pascual Chávez Villanueva, quien con este acto ha dado comienzo a la visita que va a girar por la inspectoría de Sevilla que engloiba Andalucía, Extremadura y Canarias, hasta el próximo jueves 14. Como el sucesor de Don Bosco recordaba en las palabras finales de agradecimiento, la imagen cordobesa es la única en el mundo que ha recibido la distinción de una coronación pontificia, un privilegio que tiene solamente la imagen de María Auxiliadora de Turín. Un centenar de sacerdotes religiosos y diocesanos concelebraron la solemne eucaristía, que presidió el arzobispo coadjutor de Sevilla y administrador apostólico de Córdoba, monseñor Asenjo Pelegrina. El prelado fue el encargado de bendecir las coronas, obra de la afamada orfebrería cordobesa, y colocarlas sobre las sienes del hijo Jesús y de la Madre, la Auxiliadora de los Cristianos.
Chávez y Asenjo también han acompañado durante un trayecto la procesión posterior de la Virgen, ya coronada, de regreso a su santuario, acompañada por varios cientos de devotos y fieles. Les ofrecemos un amplio reportaje de la Coronación, efectuado por Juan Manuel Palma que cámara en ristre ha captado esta magna Galería Fotográfica que le brindamos, bajo el título de Momentos Inolvidables: