
El pasado 8 de diciembre Sevilla recibió a miles de visitantes que hicieron cola para poder entrar al Real Alcázar. Más de hora y media de espera. La cola llegaba hasta la Plaza de la Alianza pasando por la calle Joaquín Romero Murube. La cola forma parte del paisaje y la verdad es que la dirección del Real Alcázar parece que no encuentra la clave para reducir la espera de los visitantes y la cola. Es una problema de planificación, organización y control operativo. También es un problema de seguridad a solucionar.

