A la izquierda de la escalinata de subida al Faro se encuentra una lápida conmemorativa dedicada a Francisco Javier Marquina, para muchos un desconocido. Este monolito ha sufrido cuatro cambios de ubicación desde su colocación en 1946 a la actualidad.
Primeramente estuvo colocado frente al mismo faro. Segundo detrás de éste, donde estaba la fuente que se colocó en 1992 cuando se remodeló la Plaza de América. Tercero en la pequeña rotonda que se hizo en esa misma fecha frente a la escalinata y últimamente ha vuelto a la izquierda de la escalera en un lugar donde pasa totalmente desapercibido.
Con respecto a Chipiona, la figura de Francisco Javier Marquina merece especial atención, ya que fue uno de los hombres que más hizo por elevar la categoría de Chipiona y de los temas relacionados con la navegación. Pavimentó y aceró la actual Avenida del Faro, por aquel entonces denominada Queipo de Llano, y pendiente su iluminación.
Un dato desconocido era el proyecto de transformación del puerto pesquero de Chipiona, que quedó en suspenso hasta que en 1992 lo acometiese la Junta de Andalucía. Éste y otros proyectos fueron olvidados por la Administración tras su misteriosa muerte semanas después de una visita a Chipiona donde todo el pueblo le recibió con un homenaje multitudinario.
Fue el 23 de noviembre de 1946 cuando visitó el Faro, en el mismo día en que el Ayuntamiento de Chipiona le concedió el título de Hijo Adoptivo, bajo el mandato del entonces Alcalde de Chipiona José María Miranda Nieto, y en que se inauguraba el monolito instalado en su honor en las proximidades del Faro.
El día del nombramiento como Hijo Adoptivo fue toda una fiesta en la población que le recibió con aclamaciones y banderitas. Su muerte prematura el 13 de diciembre de este mismo año, a escasos días de su nombramiento como Hijo Adoptivo, cayó como un jarro de agua fría en Chipiona al desvanecerse todos los proyectos pendientes para la localidad.
Durante muchos años se ha especulado en Chipiona, sin prueba alguna, sobre esta muerte repentina que supuso un retraso para el progreso de la localidad.
El homenaje se realizó el día 23 de noviembre de 1946, en el que el Alcalde de Chipiona, publicó un bando municipal en el que animaba a la población a asistir a los actos de reconocimiento que se le rindieron.
El bando decía así:
¡Chipioneros!
<<El próximo sábado, día 23, a las 12 horas, llegará a nuestra Villa el Excmo. e Ilmo. Sr. D. Francisco Javier Marquina Borra, Subsecretario de Obras Públicas, a quien le debemos las recientes e importantes reformas y la total urbanización de la Avenida del General Queipo de Llano y la concesión de otras vitales mejoras, que en su día se harán públicas, y que convertirán a Chipiona en el pueblo próspero que todos deseamos.
Para agradecer su altruista labor, el Ayuntamiento ha acordado nombrarle hijo adoptivo de esta Villa y espero que todos, sin distinción de clase ni condición, le demuestren también su reconocimiento, acudiendo a la entrada de la población para recibirlo y asistiendo al acto de la entrega oficial del Título y descubrimiento de la Lápida que da su nombre a la Glorieta del Faro, lo que tendrá lugar seguidamente.>>
EL ALCALDE
Testigos presenciales de aquel día lo recuerdan como muy festivo con multitud de niños y paisanos con banderas de España que acudieron a recibirle a la entrada del pueblo y a la Glorieta que llevaría su nombre a partir de ese momento.
Días después de este homenaje, Marquina se sintió indispuesto y murió en Madrid de forma repentina. El hecho desató en la época multitud de rumores, infundados o no, que situaban la muerte del benefactor en la órbita de una interesada desaparición. Numerosos han sido los chipioneros que a lo largo de estos años han sido preguntados por el infortunio de Marquina, respondiendo con un espeso silencio, caras de contrariedad o temor. De todas formas el hecho objetivo fue que tras su muerte los numerosos proyectos para Chipiona quedaron en el olvido.
Este personaje que mostró su cariño por Chipiona fue agradecido en su día por la Corporación Municipal nombrándole Hijo Adoptivo de la Villa en 1946.
Tristemente hoy en día su figura está olvidada entre la ignorancia de unos y la estulticia de otros.
NOMBRAMIENTO DE HIJO ADOPTIVO DE CHIPIONA.
Acta del Ayuntamiento de Chipiona nombrando Hijo Adoptivo de la Villa a Francisco Javier Marquina:
<<Abierto el acto, el Sr. Alcalde comienza el desarrollo de su moción haciendo un breve esbozo de la figura del Excmo. e Ilustrísimo Sr. D. Francisco Javier Marquina, Subsecretario de Obras Públicas, para destacar seguidamente el sincero afecto que siempre ha mostrado por esta localidad, cuyos problemas encontraron en él, en todas las ocasiones, un espíritu comprensivo y amistoso.
Entre las obras que se deben, no ya a su protección, sino a su iniciativa, se encuentran las de pavimentación y acerado de la Avenida del General Queipo de Llano, aún pendientes de algunos detalles para su completa ultimación y cuyo coste total se elevará a muy cerca del medio millón de pesetas. Las aspiraciones de Chipiona, ya tradicionales, en orden a la consecución de un puerto pesquero capaz de crear y mantener la industria suficiente para lograr la anhelada independencia económica han merecido también su mayor atención y estudio. Por último, y aún sin ser específicamente de su Ramo, a los proyectos para un grupo escolar y vivienda de maestros, que actualmente se tramitan, les está prestando su valioso apoyo para que sean pronto una magnífica realidad.
Por todas la razones enumeradas, cree la Presidencia que el Excmo. Sr. Subsecretario de Obras Públicas se ha hecho acreedor al sincero agradecimiento de todos los buenos hijos de esta localidad y, para que de una manera oficial y perdurable conste el mismo, propone que, si la Corporación lo estima oportuno, se le otorgue el nombramiento de hijo adoptivo de esta Villa y que su nombre quede incorporado a ella rotulando con él la actual glorieta del faro.
La Gestora, oído el expuesto del Sr. Alcalde y compenetrada del espíritu que la anima, acordó por aclamación nombrar hijo adoptivo de esta villa al Excmo. e Ilmo. Sr. Don Francisco Javier Marquina y como testimonio de este agradecimiento por su fecunda labor en pro de los intereses locales, se acordó también rotular la actual rotonda del faro con el nombre de “Glorieta de Francisco Javier Marquina.>>
Juan Luis Naval Molero. Cronista Oficial de la Villa de Chipiona.
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