Canta, Rocío, canta, dice el poema que Rafael Alberti, uno de sus más sentidos admiradores, escribió a Rocío Jurado. Capaz de conquistar las almas más sensibles con la fuerza de su voz, la faceta humana de la chipionera ha quedado oculta a veces por una trayectoria artística sin comparación. Solo una ha sido ‘la más grande’.
La periodista sevillana Marina Bernal profundiza como nunca antes se había hecho en los estratos más emocionales e íntimos de Rocío Jurado en Canta, Rocío, canta: una biografía en la que trece personas que la conocieron íntimamente han escrito trece prólogos, uno por cada año que hace que se nos fue la artista: Ortega Cano, Gloria Mohedano, Amador Mohedano, Luis del Olmo, Javier Osborne, Jesús Quintero, Antonio Burgos, Nieves Herrero, Javier de Montini, Isabel Gemio, Tico Medina, Carlos Herrera y Rosa Villacastín.