Me llamo Silvia Linares, tengo 34 años y vivo en Manresa, una ciudad a 60 Km de Barcelona. Hace tres años, aproximadamente, padecí una agorafobia que se me desencadenó a raíz de una gran ansiedad, motivada por un mobbing que sufrí en mi anterior trabajo. Mi vida quedó absolutamente limitada por un miedo fóbico, sin causa lógica, que dominaba mi vida y anuló por completo mi personalidad. Llegué al extremo de no poder salir a la calle, ni quedarme sola en casa, ni poder compartir la mesa con mi propia familia cuando nos reuníamos para comer los fines de semana, a menos que me sentara en un extremo para poder ausentarme con mayor facilidad en caso de sufrir un ataque de pánico. Tuve que perderme, también, acontecimientos claves en mi vida: el nacimiento y bautizo de mi sobrina, estar junto a mi padre mientras lo intervenían de una operación muy delicada a corazón abierto y la última fiesta de cumpleaños de mi abuela antes de que quedara ciega y postrada en una cama a causa de una embolia.
No tenía la autonomía ni libertad que cualquier ser humano necesita para vivir dignamente; la frustración e impotencia que sentía eran enormes y todavía se agravaba más por la incomprensión de mis seres queridos que no podían entender mi miedo. Ellos buscaban una lógica que no existía a mi miedo y el sufrimiento era todavía mayor. Tenía la sensación de que vegetaba en vida: aunque latiera mi corazón, mi mente estaba apagada; mi única opción era salir en busca de ayuda y entonces fue cuando di el gran paso, que sólo un agorafóbico podrá entender y valorar: PISAR LA CALLE PARA IR A LA CONSULTA DE UN PSIQUIATRA. Algo tan simple como bajar las escaleras de mi casa, meterme en un coche y apearme delante mismo de la consulta, supuso un gran esfuerzo. A partir de aquel día mi vida dio un giro de 180 grados porque por primera vez alguien podía entenderme y descifrar el nombre de aquel miedo paralizante: AGORAFOBIA. Después de conocer mi diagnóstico y de ser muy bien informada por mi psiquiatra acerca del trastorno, el tratamiento a seguir y los objetivos a medio y largo plazo, tuve una gran sensación de alivio: salí con ganas de luchar y vencer mi enfermedad. Deposité toda mi confianza en Luis, mi psiquiatra, desde la primera consulta, ya que la atención recibida por él fue excelente, tanto a nivel profesional como humano.
Mientras luchaba por vencer esta enfermedad, exponiéndome a las situaciones que me causaban miedo, tuve la necesidad de plasmar por escrito toda mi experiencia de autosuperación: desde todo el sufrimiento y desconcierto antes de conocer el diagnóstico hasta todas mis salidas diarias, relatando todas las estrategias que utilizaba para engañar mi subconsciente, los esquemas mentales que utilizaba para motivarme y no anticipar los pensamientos catastróficos y un largo etcétera. Mi psiquiatra fue mi primer lector, quedó tan asombrado de la claridad con qué transmitía el sufrimiento y la lucha por vencer la agorafobia, que pensó que con mis palabras podría ayudar a muchas personas que como yo, se encontraran tan desesperadas sin saber qué padecían o con pocas esperanzas en su curación. Fue entonces cuando quise dar vida a esas palabras en forma de libro.
Conseguir que me publicaran el libro ha sido mi segunda lucha. He puesto todo mi esfuerzo: personal y económico, para conseguirlo y principalmente mucha ilusión. Una editorial de Madrid: "Entrelíneas Editores" creyó en mi libro y apostó por él y a día de hoy son ya casi 500, las personas que me han leído y agradecido el haber escrito el libro: no sólo enfermos de agorafobia, sino también familiares y profesionales de la salud mental. El libro lleva por título: "Mi lucha contra la agorafobia", está escrito con la intención firme de que pueda servir de faro para orientar a todas aquellas personas que se encuentren tan desesperadas como yo, al inicio de mi enfermedad, mediante el testimonio en primera persona de alguien que ha logrado controlarla hasta el punto de hacer una vida completamente normal, sin limitaciones; me gustaría, también, que a través de su lectura, todas aquellas personas que deban convivir con un agorafóbico puedan entender cómo se vive el trastorno dentro de la piel de quien lo sufre y no se empeñen en buscar un motivo lógico a un miedo que no lo tiene. Por otra parte, me gustaría que a nivel social hubiera más información para evitar los prejuicios que todavía hay acerca de los trastornos mentales por culpa de los cuales, muchas personas viven la agorafobia en silencio por miedo a ser discriminadas e incluso, hay quienes se sienten culpables por padecerla.
Recientemente, junto con mi psiquiatra, hice dos presentaciones del libro: una en mi ciudad: Manresa y otra en una librería espacio cultural que goza de un gran prestigio intelectual en Barcelona y se llama "Excellence"; el interés y la acogida del público fueron tales, que, incluso, en este último centro nos han pedido de dar una conferencia posterior sobre agorafobia. Han sido, también, varios, los medios de comunicación gráficos y audiovisuales en Cataluña que han dado difusión sobre la agorafobia a raíz del libro. Puedes consultar información sobre el libro en mi página web: www.silvialinares.com.
Debido al interés que despertó el libro en algunas comunidades de Andalucía y gracias al apoyo del presidente de la asociación sevillana de afectados de agorafobia ASEAPA, tengo el placer de comunicarles que el próximo viernes 4 de mayo a las 19.30 horas daré una charla- presentación del libro en la librería Beta, ubicada en la calle Sierpes 25, en Sevilla. Intervendrán: Jordi Simon, periodista y Luis Villar Álvarez, psiquiatra adjunto del Centro de Salud Mental del Hospital Sant Joan de Déu, fundació Althaia, en Manresa.Agradecería vuestra asistencia. Un saludo, Silvia.