Si el año pasado hubo un combate entre Rodolfo Chikilicuatre y todos los demás participantes, esta final para elegir representante español en Eurovisión se convirtió en un mano a mano entre dos cantantes: Melody y Soraya. Y, en un duelo ajustado hasta el final, Soraya salió ganadora con su tema 'La noche es para mí'.
Ambas entonaron estribillo pegadizo y se rodearon de atléticos bailarines. La final que daba el billete para Eurovisión era cosa de dos. Melody y Soraya eran los únicos rostros reconocibles por la audiencia. Y finalmente, tras un ajustado recuento que acabó en empate, los votos del público prevalecieron sobre los del jurado.
"¡España, os quiero!", exclamó Soraya sobre el escenario cuando supo que había ganado, después de que Alaska desvelara el resultado del complejo recuento de votos, que se zanjó con empate técnico y fue resuelto por el voto de calidad del público, que prefirió a la extremeña.
El último estadio antes de la definitiva final europea, que tendrá lugar en Moscú el próximo 16 de mayo, se situó anoche en el teatro LAliança de Poble Nou, en Barcelona, con tintes más bien modestos pero emoción a raudales. Cumplieron con sus vítores los familiares de los artistas -los que más ruido hicieron- y los los fans de Melody y Soraya.
Mediante un programa interminable y marcado por las prisas, La 1 de TVE logró condensar la última de las semifinales (con 10 participantes), una repesca (que desapareció por arte de magia) y la ansiada final (con otras 10 actuaciones). Así se cerró la primera fase del Festival, que se le estaba atragantando en términos de audiencia: unos pobres 6,3% y 6,5,% de cuota de pantalla en las dos primeras semifinales.
En total, más de tres horas y media de música que acabaron con una victoria de la artista salida de la factoría de 'Operación Triunfo'. Cabe recordar que, en esta edición de Eurovisión, el resultado ha sido encauzado por los miembros de un jurado, con José Luis Uribarri al frente, que ha servido de filtro para erradicar cualquier atisbo de 'frikismo'. Como consecuencia, el veredicto de estos cinco elegidos ha valido tanto como el conjunto de mensajes de texto y llamadas de un público que anoche, en una jornada maratoniana, tuvo que vencer al sueño para apoyar a sus favoritos. Eso sí, al final prevaleció el juicio del pueblo.