El ciclo anual no se detiene. La primavera está hecha para iluminar melancolías. El sol tibio de abril señala siempre a la Sevilla más luminosa. A toda Andalucía. La primavera es una estación deslumbrante que nos hace mirar al sur. Por eso cada año por estas fechas aparto durante unos días los discos tristes y acudo a la cita de las esperanzas. A beber un rato de optimismo antes de enfangarnos de nuevo en la rutina de un sol que se irá haciendo más indeseable a medida que muera la estación de los paseos y legue la de las playas.
Esta primavera es un poquito especial porque sale, por fin, un nuevo disco de Siempre Así. Desde Sevilla. Se trata de El amor es otra cosa, que ya he podido escuchar en las últimas horas. En la primera escucha del disco ya me he encontrado todos los elementos por los que me sumé hace años a la legión de seguidores de Siempre Así. Me incorporé a tan variado conjunto, para empezar, porque son buena gente. También porque, como es bien conocido, tienen unas voces maravillosas. Y porque muchas veces logran transmitir una energía, una juventud y una alegría que ya querrían para sí diez mil grupos de rock. Y, por supuesto, porque Rafa Almarcha tiene una sensibilidad fuera de lo común para escribir y componer canciones. Es el único artista que frecuento capaz de escribir canciones de amor de verdad. Quiero decir que es capaz de reflejar con normalidad lo que es siempre el amor al final: una balanza de flores y espinas en la que normalmente pesan más las flores. Lo cuenta sin más, sin necesidad de caer en cursilerías, ni estridencias. Y consigue dejar un poso de optimismo, una esperanza, que se agradece siempre y más en estos tiempos tan desesperantes.
Rafa Almarcha se muestra especialmente brillante en Completamente tieso, single del nuevo disco de Siempre Así. Pocos autores españoles pueden escribir con tanta simpatía y belleza una canción tan triste, una historia de amor en tiempos de crisis económica. Todo nace de una premisa que es cierta, al menos, desde que el hombre llegó al mundo: el amor no necesita nada que se pueda comprar: No te mando flores porque estoy tieso / pero alguna del parque te robaré ( ) No podemos viajar a otros países / pero sí que podemos pasear / Y dejar que Sevilla nos improvise / Una tarde que nunca olvidarás. ( Confieso que hasta que he acudido al libreto estaba convencido de que cantaban Y dejar que Sevilla nos hipnotice).
Me decía Rafa Almarcha hace algunas semanas que este disco es muy, muy Siempre Así. Al sobrevolar las canciones no me queda más remedio que darle la razón. Esto es lo mejor que tienen todos ellos, lo que saben hacer como nadie. Lo han juntado con esmero otra vez-y lo han servido en una gran bandeja de plata. Y los sevillanos se van a dar bofetadas por llegar antes que nadie a picotear de esa bandeja en esta feria de abril que se nos viene encima. Y detrás iremos su legión de fans de toda España y América Latina, en busca de un poquito de Vida, de Ya no te quiero, de El viento, de El amor es otra cosa, de la fiesta en directo de Vamo a escuchá un disco más-, y de Completamente tieso, en cuyo videoclip, por cierto, César Cadaval, de Los Morancos, hace un gran papel de protagonista. El mismo César Cadaval que deja atrás, de nuevo, su careta de humorista de fama, para firmar una gran letra en el corte número 9, Con un trocito de luna.
En fin, hay magia, hay optimismo, hay melancolía, hay rumba y fiesta también, y momentos de calma y un montón de cosas más en El amor es otra cosa. No es mi intención destripar cada una de las canciones del álbum ahora, que ya lo haré próximamente, pero sí celebrar que ya está en las tiendas. Un disco que nos trae un poquito de Sevilla, un poco de alegría, y mucho, mucho talento, para acompañar las tardes suaves de primavera.
