La plataforma convocante demuestra la falta de consenso en la futura instalación de los molinos.- Mas de dos mil personas se manifestaron en la tarde de ayer en Chipiona para mostrar su repulsa a la pretendida instalación de 300 molinos en las costas de esta localidad, proyecto impulsado por la empresa Magtel, el Ayuntamiento y la Universidad de Cádiz. La manifestación, convocada por la plataforma comarcal de Chipiona- Rota- Sanlúcar de Barrameda Por un horizonte sin molinos, partió a las siete y media de la tarde de las inmediaciones de la antigua lonja pesquera para luego discurrir por los paseos marítimos de La Cruz del Mar, Las Canteras, Costa de la Luz y finalmente el Humilladero junto al Santuario de Regla. La marcha discurrió pacífica y sin incidentes bajo la atenta mirada de la Policía Local cuyos agentes contribuyeron a facilitar el paso de la misma. La correcta organización de la plataforma hizo que esta protesta fuera de forma festiva con pancartas en las que se podían leer eslóganes como La playa no se vende, Queremos horizontes libres o Nuestra economía depende de nuestras costas, entre otras.
Al final del recorrido sobre las nueve y media de la noche, el portavoz de la plataforma, el presidente del grupo ecologista CANS Rafael Ruiz, leyó un manifiesto en nombre de la organización en el que destacó que la protesta evidenciaba que no hay consenso en la instalación de los molinos. Dio las gracias por la presencia de los asistentes y a todos aquellos que pretendían estar y no pudieron hacerlo por miedo o coacciones. Advirtió del error en el que la mayoría de políticos incurren de dar la espalda al pueblo como en este caso el equipo de gobierno socialista encabezado por el alcalde Manuel García con la pretendida instalación de 300 aerogeneradores dos veces más altos que el faro en la costa de Chipìona. Pesca , turismo y medio ambiente se podrían ver afectados por estas instalaciones de la que la empresa Oceana ha dado su visto bueno en un estudio realizado sorprendentemente en dos días, cuando el tiempo medio estimado de estas investigaciones es de dos años. Otros portavoces de la plataforma como Julio Lorenzo y Diego Miranda también tomaron la palabra para mostrar su rechazo al parque eólico marino.