El poeta sevillano Joaquín Márquez ha obtenido el premios de poesía Ángaro 2001 que convoca la asociación de dicho nombre y el Ayuntamiento de Sevilla. El premio está dotado con 5.000 euros y la publicación de la obra titulada Vestigios del paraíso
El jurado ha destacado la equidistancia entre tradición y modernidad del poemario, así como la unidad y originalidad de un enfoque lírico en el que predomina una mirada poética lúcida y penetrante sobre las cosas y los seres que oscila entre la ironía, el escepticismo, la evocación y la nostalgia.
El jurado acuerda por unanimidad igualmente conceder un Accésit sin dotación económica consistente en la publicación de la obra al poemario titulado Las trenzas de la historia, del autor Luis García Pérez, con residencia en Puertollano.
A esta edición del Premio han concurrido más de un centenar de obras procedentes de casi todos los puntos de la geografía nacional y de otros países extranjeros como Chile, Argentina, Cuba, Paraguay, Serbia o Israel. La procedencia de las obras ratifica la importancia y universalidad de este galardón de habla castellana
El acto de entrega fue el pasado 14 de octubre en los Reales Alcázares de Sevilla y estuvo presentado por el poeta sanluqueño Juan José Vélez Otero
Según su biógrafo Juan José Vélez Otero, Joaquín Márquez nació en Sevilla en 1934. Allí residió de forma habitual hasta que, en 1984, abandonó sus anteriores ocupaciones profesionales para dedicarse por entero a la literatura, trasladándose a las luminosas costas de Chipiona y, posteriormente, a Sanlúcar de Barrameda, donde ha residido los últimos años.
Desde 1974 hasta 1979, en que se interrumpe su publicación, dirige la revista Cal. Su poesía, hasta la fecha más de veinte libros, ha sido distinguida con relevantes premios, entre ellos el Boscán, el Ausias March, el Ciudad de Barcelona, el Tiflos o el de la Feria del Libro de Madrid. A partir de 1984 ha simultaneado su ocupación como poeta con su tarea como narrador. Es autor de cuatro novelas, la segunda de la cuales El jinete del caballo de copas obtuvo el Premio Andalucía.
A pesar de su nutrida producción lírica, y atenidos a la fecha de publicación de sus libros, Joaquín Márquez puede considerarse un autor tardío, dado a conocer una vez alcanzada su madurez vital y literaria, cuando ya lo habían hecho los principales autores de la generación posterior a la suya. Ello ha supuesto que no se aprecien en sus primeros títulos los normales titubeos expresivos del aprendizaje; pero también ha implicado una cierta desubicación en los sistemas historiográficos vigentes, muy compartimentados y rígidos. Desde que en 1973 publicara Hay tiempo de nacer, Joaquín Márquez ha ido entregando a la imprenta sin grandes pausas un libro tras otro, hasta dar cuerpo a una obra que lo sitúa en un lugar relevante entre los poetas de su tiempo.
Su poesía recibe influjos diversos, de Juan Ramón y Antonio Machado a Luis Rosales, y por supuesto la rica corriente de poesía meridional de posguerra que enlaza la dicción simbolista con un culturalismo matizado y vinculado a la experiencia humana. La temática dominante en su obra es muy variada, y responde a los universales humanos de todas las épocas, atravesados por un cierto tono existencial: el discurrir del tiempo y sus efectos, el arte y su correlato existencial, la belleza y sus demonios, la sublimación de la anécdota cotidiana, el desmoronamiento de las ilusiones, la reflexión sobre la muerte. Los motivos concretos de los que arrancan sus poemas son el punto de partida de un proceso de sublimación esencialista, que se presenta literariamente coloreado por un sistema metafórico propio de los mejores poetas de tradición andaluza.
Pedro Rodríguez Pacheco se ha referido a la poesía de Joaquín Márquez como «la vibración de la vida en el color, en la sensualidad de unos sentidos abiertos a todas las incitaciones. Una poesía basada en las facultades, en los dones, en los registros de la voz, nunca de los ecos o las limitaciones que imponen los modelos o las escuelas».
Prueba magnífica de la justeza en el uso del lenguaje y de la capacidad para ascender a consideraciones generales a partir de instancias culturales y artísticas inmediatas es su libro La aguja sobre la piedra (1982), demorado recorrido por las pinturas y motivos de la Catedral de Sevilla. En cuanto a la experiencia de lo cotidiano, las emociones y los paisajes, habríamos de remitirnos a Substancia fugitiva (1984), una original serie de poemas que nos retratan la visión del París que vivió en aquella época.
La intuición poética de Joaquín Márquez, señaló Enrique Molina Campos, allega por el inexcusable camino del lenguaje todo un universo de referencias sensitivas y emocionales que se constituye en genuina poesía. Un sistema de filtros formado por la cultura, el ingenio y la ironía no frena la emoción del poema, pero sí la gesticulación retórica o la exasperación expresiva, ausentes de esta escritura. Y todo ello en un verso fluido, melodioso, con el nervio templado y preciso para transmitir el temblor.
SOBRE LA POESÍA DE JOAQUÍN MÁRQUEZ
El universo del poeta es sólido y fascinante. El poemario resulta así todo un grato exponente de unidad y, de tal perfecta conjugación, surge la evidencia de una lujosa melancolía que convierte a este libro en una de esas obras que podrían calificarse de sencillamente inolvidables.
Ariel Ferraro
¿En qué estado de vigilancia vive un poeta de las características de Joaquín Márquez? De pronto, el llamado verso de los dioses que conmociona y pone en marcha el poema.
Pedro Rodríguez Pacheco
Lo difícil en poesía es llegar a ser una voz, Márquez lo es.
Juan Van-Halen
No es corriente en nuestro tiempo encontrarse con una voz tan clara, auténtica y, a la vez, tan honda y conmovedora.
Rafael Montesinos
Estará amaneciendo ahora, / Joaquín Márquez, poeta amigo, / sevillano de voz total, / en tu ciudad que nunca he visto.
Ángel Crespo. Oda XXIII Islas Vírgenes
Angel Crespo a quien yo admiro mucho- dice: sevillano de voz total. ¡Exactamente! Da gusto que funcionen juntas conciencia lúcida e intención e intuición poéticas.
Jorge Guillén
OBRA PUBLICADA
Poesía: Hay tiempo de nacer (Col. Angaro. Sevilla, l973). Los pies de las estrellas (Col. Aldebarán. Sevilla, l974). Premio "Aldebarán". La casa navegable (Col. Angaro. Sevilla, l974). Premio "Ciudad de Barcelona". El tren desnudo (Col. Alamo. Salamanca, l974) Premio "Alamo". Pasos en la memoria (Col. Ausias March. Gandía, l976). Premio "Ausias March". Albergue para noctámbulos (Col. Angaro. Sevilla, l978). Accésit Premio "Angaro". Etiqueta para pieles humanas (Col. Leopoldo Panero. Madrid, l978). Solo de caracola para un amor lejano (Col. Premios Boscán. Barcelona, l978). La lluvia traducida (Col. Dulcinea. Madrid, l978) Premio "Ricardo Molina". La aguja sobre la piedra (Col. Adonais. Madrid, l982) Premio "Pérez Embid". Todo mortal (Col. Premios Villa de Rota. Rota -Cádiz-, l983). Substancia fugitiva (Endymion. Madrid, l984). Premio "Miguel Hernández". Cristal de Bohemia (Col. Premios Leonor. Soria, l985). Fe de erratas (C.A. Municipal de Pamplona, l985) Premio "Arga". Plantaciones de lúpulo (Col. Premios Blas de Otero. Majadahonda -Madrid-, l989). Clave de espumas ( Col. Premios "Tiflos". Madrid, l994) De tanto amor eterno (Antología de poemas de amor l973-l99O. (Renacimiento.Sevilla, l992). Libro de familia (Endymion. Madrid, l987) Premio "Feria del Libro de Madrid". Por selva oscura (Endimión. Madrid 2001) Premio Aljabibe. Album de seres perdidos (Diputación Provincial de Soria 2002) Bajo las cúpulas doradas (Libros del Malandar) Sanlúcar de Barrameda 2004) Puente de los suspiros (Colección Melibea) Talavera de la Reina 2005 Dibujado en la nieve (Algaida) Premio Ciudad de Badajoz 2005 Fábulas peregrinas (Universidad Popular) Premio José Hierro 2006)
Novelas: Reconstrucción de la niebla (Hiperion. Madrid, l984). El jinete del caballo de copas (Espasa Calpe. Madrid, l987). Premio "Andalucía De un gorro color limón (Col. Premios Castilla-La Mancha. Madrid, 1990) La música de don Juan (Algaida. Sevilla 1999) Finalista Premio Ateneo de Sevilla.