Como todos los años y rompiendo cánones y dejando en evidencia al calendario gregoriano, la Primavera biológica ha llegado a Sevilla. Ya el pasado año hizo estragos en el norte de África, desato guerras, cambio gobiernos, dio paso a la juventud en detrimento de sabios y doctores. Nos trajo nuevos virus de la gripe contra los que no sirven las vacunas convencionales. El cielo azul, la subida de la temperatura y el canto de los pájaros la dan la bienvenida.