12 orejas y hasta 3 rabos se cortaron en una gran tarde de toros en favor de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC)
FICHA:
Se lidió un astado para rejones de Bohórquez y seis de Algarra para lidia a pie, nobles.
Sergio Galán, dos orejas. Enrique Ponce, una oreja. El Cordobés, dos orejas y rabo. El Fandi, dos orejas y rabo. López Simón, dos orejas y rabo. Antonio Puerta, dos orejas. El novillero Filiberto, oreja.
La plaza se llenó.
COMENTARIO:
Un año más la Plaza de Toros de Murcia se ha llenado de solidaridad para la XXII edición del festival a beneficio de la Asociación Española Contra el Cáncer.
El primero de la tarde, de la ganadería de Fermín Bohórquez fue para Sergio Galán. El rejoneador cuajó una faena variada, en la que toreó con el astado pegado a las cabalgaduras. Conectó con los tendidos sobre todo montando a Apolo y a Ojeda antes del certero rejón. Paseó dos orejas.
El primero para la lidia a pie correteó de salida, pero no fue óbice para que Enrique Ponce se luciera en los lances de verónica y la revolera de remate. A este toro, flojo de los cuartos traseros, le realizó un trasteo en el que predominó su característica clase y oficio, componiendo la figura. Pinchó en reiteradas ocasiones y paseó una oreja.
El astado de El Cordobés le sirvió para demostrar su experiencia y ofrecer a su público el espectáculo. El respetable enloqueció con el salto de la rana y los molinetes invertidos. Mató de estocada sin puntilla y a sus manos fueron a parar dos orejas y rabo.
El Fandi anduvo variado con el capote, especialmente en el quite después del caballo, con navarras, media de rodillas y revolera. Como siempre, se lució en banderillas con tres pares meritorios, uno de ellos al violín y otro ejecutando la suerte de la moviola. Demostró con la franela que está en muy buen momento y destacó toreando con la zurda. Anduvo eficaz con el acero y también paseó los máximos trofeos.
López Simón ha derrochado clase y gusto con el quinto de la tarde. Ha tirado de repertorio y ha puesto todo de su parte para triunfar como sus compañeros. No dudó en echar rodillas a tierras e incluso en realizar un aplaudido desplante antes de la estocada. Dos orejas y rabo.
El ceheginero Antonio Puerta ha hecho un esfuerzo, pero se le notó algo mermado a consecuencia de la cogida sufrida en Cieza. Tuvo un buen inicio de faena con pases cambiados, pero el toro tenía mejor pitón izquierdo, por lo que consiguió dar los naturales de mérito. Resultó cogido feamente, por lo que después de pasear dos orejas orejas pasó a la enfermería a observación.
Filiberto fue el encargado de cerrar el festejo. Comenzó con un ramillete de verónicas para posteriormente brindar al público. Ha estado voluntarioso pero durante la faena de muleta lo ha enganchado de mala forma, sufriendo una voltereta que le dejó mareado. Segundos después volvió a sufrir otras dos espeluznantes volteretas que le restaron fuerza para entrar a matar. Necesitó varios intentos hasta que llegó la estocada. Una oreja.