Puede que sea el elemento de mobiliario urbano de Sevilla más fotografiado. En sí misma, la fuente funcionando, es un espectáculo. Todos quieren llevarse una foto de haber estado aquí y se hacen selfies y fotos en grupo. Esta fuente, de noche, con luz y sonido convertiría a la Plaza de España en el espacio público más visitado de Sevilla.