La playa de Micaela se encuentra colindante al final del Puerto Deportivo de Chipiona. De escasos kilómetros pero acogedora,
este año, puede presumir de su soñada Bandera Azul de los Mares Limpios, de la Unión Europea, y se debe a esos años que ha estado
en el olvido y desaprovechada. Ante el crecimiento de la población y veraneantes, desde hace más de 15 años ha ido avanzando poco
a poco hacia su enfonque de mejoría. Los residentes y propietarios de viviendas vacacionales y locales se propusieron que esta playa fuera
remoderada con el fin de ser utilizada en bien de todo. Ante tantas protestas, el Ayuntamiento tuvo que echar manos al asunto, viendo que la playa
de Micaela podría ser aprovechada para los visitantes que atracaban sus embarcaciones en el Puerto Deportivo, y sobretodo, formar parte
del entorno turístico y vacacional. Hace dos veranos, 2015, estuve en el chiringuito instalado arriba y pude contemplar con una vista
panorámica el cambio positivo de la playa con su equipamento adecuado, servicios, aparcamiento y fácil acceso también para personas
con discapacidad física. No obstante, me fijé que todavía necesitaba mejorías.
A partir de hoy y con la Bandera Azul ondeando, espero que la playa de Micaela siga con la línea de calidad y mantenimiento, dejando atrás
ser la "cenicienta" de Chipiona y lucir en los folletos y planos del pueblo a la vista del turista, como una playa más en ambiente y atractiva
de esta localidad. Y seguramente, la temporada de 2017 estará de moda acudir a este lugar y supongo que ante la posible revaloración de la zona,
el sector inmobiliario querrá invertir, por lo que el Ayuntamiento debiera supervisar la gestión de nuevos proyectos a realizar. A la playa de Micaela, enhorabuena por su merecida bandera y ojalá, para siempre.
SevillaPress
