Una exposición de fotográfica acerca desde ayer los antiguos carnavales de Chipiona y complementa la programación de carnaval de este mes de febrero. La muestra, realizada conjuntamente por la Asociación cultural Caepionis y la delegación de Cultura del Ayuntamiento de Chipiona, consiste en una recopilación de 102 fotografías sobre la celebración de esta fiesta desde el año 1918 al año 1975.
El delegado de Cultura, Rafael Pastorino, felicitó a la Asociación cultural Caepionis por esta iniciativa que “va a permitir conocer como fueron los orígenes del Carnaval de Chipiona y comprobar cómo dista de la fiesta que conocemos en la actualidad”.
La alcaldesa de Chipiona, Isabel Jurado, valoró la gran riqueza que la asociación genera a la localidad con cada una de las actividades que organiza y en concreto con esta exposición gracias a la que “podemos conocer en imágenes como se vivía entonces y como nació la que hoy es la fiesta grande de Chipiona”.
En las imágenes que se ofrecen se puede apreciar cómo era el carnaval en aquellos años en que se organizaban bailes en el Castillo y el Faro a puerta cerrada, también en Villa Margarita, un chalet situado en el Camino de Regla, o en la propia oficina de Correos. Dado que por aquel entonces esta fiesta estaba prohibida, se realizaba de puertas adentro. No obstante, había permisividad, según explica la asociación Caepionis, como lo demuestran las fotografías en las que aparecen guardias civiles. Para la celebración se traían orquestas, aunque éstas evitaban aparecer en las instantáneas para que no quedara constancia de su participación.
La preparación de la muestra ha durado tres meses. Parte de las fotografías pertenecen a la Asociación Caepionis, pero otras han sido cedidas por Manuel Ávila Durán, la familia Mellado Martín, Librada Guzmán González, María Sánchez Martín, José Antonio Díaz Jurado, Victoriano Pizarro Cordero y Amalio González Caballero. Además, la organización ha contado con la colaboración de Antonio Martín Rafoso en el aspecto musical, con María Rosa Cadierno Sánchez para el recitado de las coplas y con Eduardo Naval Molero para la confección de las siluetas de las imágenes que integran la exposición.
Las personas que pasen durante este mes por el Castillo podrán, además, durante un recorrido que se ha establecido para que la visita resulte más cómoda, disfrutar de la música que se escuchaba en esos tiempos en las fiestas que se organizaban. Para ello, se ha situado un altavoz de la época en el que sonarán las coplas y canciones, que eran algunas cantadas y otras recitadas.
La exposición, que estará abierta al público de lunes a sábado de 11:00 a 13:00 horas hasta el día 28 de febrero.