La gente se la quedaba mirando, la niña era muy alta, demasiado alta. Lo cierto es que debajo de la capa, lo que hay no es exactamente lo que percibimos a primera vista. Lo que ocurre es un bondadoso padre que ante la insistencia de su hija, cansada de caminar por la ciudad, está quejosa y cansada y el padre opta por subirla a sus hombros y la cubre con su capa. Faltan bancos en los espacios públicos.