Soy Gabriela Medin, psicooncóloga de la Fundación Aladina y hoy quiero contaros cómo en la Unidad de Hemato-oncología pediátrica del Hospital Gregorio Marañón nos hemos organizado rápidamente para seguir acompañando a nuestros niños y adolescentes, ya no sólo a medida de las necesidades de cada uno, como siempre hacemos, sino a medida de las posibilidades actuales. Por eso, continúo atendiendo a los pacientes y a sus familias por videollamada, a la vez que mantengo, por mail y por teléfono, el contacto con médicos, enfermeras y trabajadores sociales.

Por ahora, son los adolescentes quienes encuentran en esta modalidad una vía para continuar hablando de sus cosas y elaborando lo que les sucede. También los padres, que agradecen saber que hay otros que “están ahí” para compartir sus preocupaciones y sus alegrías. Poco a poco vamos viendo la mejor manera de acompañar a los más pequeños.

El trabajo de años con los pacientes y sus familias nos ha entrenado para hacer frente a lo imprevisto, a lo impensado. En las circunstancias actuales seguimos apostando por la VIDA e inventando modos de hacer con la contingencia."