Aseguran que el etarra De Juana Chaos, no recibío comida de bajo cuerda durante su primera huelga de hambre en Algeciras entre agosto y septiembre del año 2006.
Tampoco fue de su interés el conocer la noticia de que le iban a caer otros 12 años de condena por amenazas.
Los funcionarios de la prisión de Botafuegos destacan la actitud del terrorista como "fria y distante".
Estos comportamientos son frecuentes en este tipo de presos. Son conocedores de las normas y exigén su cumplimiento y cuando se sienten mal atendidos lo denuncian por la vía judicial.
En mayo de 1998 la banda asesina al concejal del UPN Tomás Caballero. De juana envió una instancia al director de la prisión de Melilla solicitando una botella de champán y un kilogramo de langostinos para celebrar la jubilación forzosa del franquista Tomás Caballero.
El gesto se repitió en una carta cuando ETA asesinó en Sevilla al concejal
del PP jiménez Becerril y su esposa.
De Juana Chaos acaba de cumplir 20 años en prisión. Entre finales del 89 fue inquilino de la prisión de Sevilla y en la cual comenzó una huelga de hambre y sed para así intentar la fuga cuando lo trasladarán al hospital.
Pero afortunadamente al etarra le salió mal la jugada y fue descubierto el plan. Durante la tregua decidida por ETA en septiembre del 98, el gobierno de Aznar decidió acercar a la península a todos los presos que estabán en las islas.
De Juana y su pareja fueron trasladados a cárceles diferentes. Pero como tenían derecho a un vis a vis regular, todos los meses había que trasladar a la etarra Inmaculada Noble a la cárcel del puerto bajo un fuerte despliegue de seguridad.
Pasaron más de tres años hasta que el juez autorizase que los dos estuviesen juntos en la misma prisión.
La estancía del terrorista siempre ha sido de régimen especial de aislamiento. Sus tres comidas del día las realiza dentro de su celda y no le está permitido salir de ella más que en grupo de cuatro y como máximo dos veces al día. Este tipo de preso goza de televisión en la celda siempre y cuando la paguen ellos y de prensa diaria.
De Juana se ha puesto en huelga de hambre varias veces por distintas protestas. Desde que le condenaron a 3.000 años de prisión, jamás ha estado cerca del país vasco. No es la primera vez que el etarra está ingresado en un hospital, a pesar de que se le obligó a una alimentación forzosa a base de suero y de la cual el etarra nunca opuso resistencia.
De Juana debería pesar 87kilos y pesa 52 kilos, pero la verdad que no nos sorprende la tremenda frialdad del terrorista