Hoy se cumplen 24 años del primer gran éxito internacional del baloncesto español, un éxito olímpico que ha pasado a los anales de nuestra historia y que durante varios años marcó el devenir de nuestro deporte. El 8 de agosto de 1984, en Los Angeles, España derrotó a Yugoslavia en la semifinal de los Juegos y se aseguró la conquista de la medalla de plata.
El equipo de Antonio Díaz Miguel se plantó en Los Angeles con verdaderas aspiraciones. Ya dos años antes, en el Mundial de Colombia, había apuntado maneras de aspirante (cuarto clasificado, tras un escandaloso arbitraje en el partido contra Yugoslavia por la medalla de bronce); y en el campeonato inmediatamente anterior, el Eurobasket disputado en 1983 en Nantes (Francia) había subido al podio como subcampeón, derrotado por Italia en la final, tras haber eliminado en semifinales a la poco menos que todopoderosa Unión Soviética con una canasta magistral de Epi en los últimos segundos.
En LA, además, no iban a estar los soviéticos, ausentes por boicot político. Una baza más para un equipo a cuya columna vertebral de los últimos años se habían sumado los mejores de la extraordinaria generación de 1959 y con varios de los hombres que en los Juegos anteriores, en Moscú y sin Estados Unidos, alcanzó la cuarta plaza. La portada de aquel mes de la inolvidable revista Nuevo Basket, con Epi y De la Cruz como protagonistas en un entrenamiento previo a la gran cita, no podía ser más elocuente: Los Angeles 84: Rumbo a una medalla.
Y el equipo lo demostró en la pista. En la primera fase, en el grupo A, España derrotó a China (102- 83), Canadá (83- 82), Uruguay (107- 90) y Francia (97- 82) y sólo perdió frente a Estados Unidos (68- 101). Y en cuartos de final superó con claridad a Australia (101- 93). En la semifinal, el equipo de Díaz Miguel se topó, el 8 de agosto de aquel año 1984, con Yugoslavia; una Yugoslavia en plena renovación generacional, pero talentosa y temible como siempre, que en cuartos había aplastado a Uruguay (110- 82).
En el primer tiempo, los plavi, capitaneados por los dos Petrovic y el pívot Knego, dominaron con cierta claridad pero sólo consiguieron irse al descanso con 5 puntos de ventaja (35- 40). Fue en el segundo tiempo cuando el equipo español lo bordó, y con un parcial favorable de 39- 21 se plantó en la gran final, asegurando la primera y hasta ahora única medalla olímpica de la historia del baloncesto español.
La final, contra la imbatible selección de Estados Unidos (con los futuros cracks de la NBA Michael Jordan, Pat Ewing, Chris Mullin, Wayman Tisdale, Sam Perkins y compañía, ya fue otra historia. Pero la verdadera final de nuestra selección, la semi contra Yugoslavia, se ganó. Y a lo grande. En youtube se pueden ver los tres últimos minutos de aquel partido histórico (http://es.youtube.com/watch?v=D- EWKaIfAeA).
La semifinal de Los Angeles 1984
ESPAÑA- YUGOSLAVIA 74- 61
ESPAÑA: Llorente (8), Margall (16), Jiménez (13), Romay (6), Martín (6), Corbalán (6), Solozábal (3), López Iturriaga (4), Epi (12), De la Cruz, Arcega, Beirán. YUGOSLAVIA: D.Petrovic (16), A.Petrovic, Zorkic (2), Knego (6), Radovanovic (15), M.Nakic (6), Dalipagic (16), Vukicevic, Zizic, Sunara, Mutapcic, Vukicevic. Descanso: 35- 40
Más información en feb.es