La duquesa de Alba, indemnizada con 90.000 euros por un libro sobre Antonio el Bailarín
El juez ha prohibido a Antena 3 Televisión y a Quarzo Producciones comercializar todo el material que tengan grabado sobre las relaciones entre la aristócrata y el artista. Un juzgado de Sevilla ha concedido a la duquesa de Alba una indemnización de 90.000 euros por una intromisión ilegítima en su honor con la publicación de un libro sobre Antonio el bailarín y sus supuestas relaciones sentimentales con la aristócrata.
Fuentes del caso han dicho que el juzgado de primera instancia 21 ha condenado al periodista Santi Arriazu, a Antena 3 y a Quarzo Producciones a abonar solidariamente dicha cantidad, así como a publicar el fallo en tres periódicos de ámbito nacional, en el programa "¿Dónde estás corazón?" y en los telediarios de Antena 3.
El periodista publicó en abril de 2006 el libro "Memorias de viva voz. Autobiografía y testamento. Antonio el Bailarín", en el que reproduce las conversaciones que mantuvo con el artista y sostiene que fue "condenado al ostracismo" porque quiso reivindicar su paternidad de uno de los hijos de la duquesa de Alba.
Inicialmente, Cayetana Fritz- James Stuart había solicitado una indemnización de 300.000 euros, que el juez Francisco Escobar ha situado finalmente en 90.000 euros, han añadido las fuentes.
Tras recibir la demanda de la duquesa de Alba, el juez prohibió a Antena 3 Televisión y a Quarzo Producciones comercializar todo el material que tuviesen grabado sobre las relaciones entre la aristócrata y Antonio el Bailarín, pero rechazó otras medidas cautelares solicitadas, como prohibir la publicidad del libro, impedir a Arriazu conceder entrevistas sobre él, y la intervención y el depósito de los ingresos obtenidos con esas actividades.
Con ocasión de la publicación del libro, el abogado de la duquesa desmintió la existencia de tal romance y dijo que el libro "contiene afirmaciones totalmente falsas que en ningún caso se corresponden con la realidad".
También afirmó que las transcripciones publicadas en el libro, que supuestamente corresponden a unas grabaciones dejadas por Antonio, "suponen sin lugar a dudas un acto de vileza, ya que no pueden ser confirmadas ni desmentidas por su supuesto autor".