El catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad de París VIII Sami Naïr ha asegurado que la Unión Europea está utilizando la inmigración como un instrumento de desarrollo del mercado: La Comisión Europea tiene una visión exclusivamente mercantil de la inmigración y sólo abre las puertas a aquéllos que le interesan.
Sami Naïr ha realizado hoy estas declaraciones en el Centro Cultural Olavide en Carmona, donde ha impartido la conferencia Europa y la inmigración, en el marco de actividades programadas dentro del Compromiso Ciencia y Conciencia, cuyo lema de este año es Inmigración, entendimiento y diversidad.
La política de la Unión Europea cambia en función de las necesidades del mercado. Si hacen falta trabajadores, acogemos con los brazos abiertos a los inmigrantes. Si hay crisis, escuchamos a los políticos de hablar de que los inmigrantes nos están invadiendo, afirma el catedrático. De esta manera, piensa que estas acciones se deben a la ausencia de la construcción de una verdadera política común europea.
Naïr, que también fue asesor del Gobierno francés de Lionel Jospin desde 1997 hasta 1999 y europarlamentario hasta el año 2004, ha señalado que existe un gran mercado migratorio mundial y los países eligen a los más que interesan en función de sus necesidades.
Con respecto a la directiva europea que permite internar a los inmigrantes irregulares durante 18 meses mientras se realizan los trámites para su repatriación, ha denunciado que favorece la exclusión entre los inmigrantes, porque beneficia a los europeos en contra de los sudamericanos, asiáticos, subsaharianos lo que constituye un problema muy grave, ya que crea fronteras entre las personas.
Además, señala que desde los países de la Unión se está favoreciendo la inmigración europea, en contra de las otras nacionalidades y regiones: En España, la comunidad inmigrante con más peso hasta hace unos años era la marroquí; sin embargo, ahora la constituye la rumana, con más de 800.000 personas de este país, ha confirmado.