Pase lo que pase esta noche, 15 de marzo, en el Ramón Sánchez- Pizjuán, el Sevilla hará historia. Jugará su choque europeo número cincuenta. 48 años después de que debutara en competiciones continentales, jugando la Copa de Europa y derrotando al Benfica en el Pizjuán por un contundente 3- 1, los sevillistas alcanzan el medio centenar de encuentros, tras haber logrado durante dos temporadas consecutivas el pase a octavos de final en la Copa de la UEFA.
En la campaña 57/58 tuvo su debut europeo. Disputó seis partidos, dos contra el Benfica, otros dos contra el Aarhus danés y, por último, dos más contra el Real Madrid de Alfredo Di Steffano. Fue aquel supercampeón liderado por la saeta rubia el que apeó al conjunto hispalense de su primera experiencia continental. Cinco temporadas después volvió a jugar fuera de nuestras fronteras en competición oficial. Fue en la extinta Recopa, donde el 2- 0 que se le inflingió al Glasgow Rangers en el partido de vuelta fue insuficiente para remontar el 4- 0 que los escoceses le propinaron a los andaluces en la ida.
La siguiente participación europea fue en la Copa de Ferias, antiguo formato de la UEFA. Era la campaña 66/67 y tampoco se pasó de la primera ronda ante el Dinamo Pitesti rumano. Lo mismo ocurrió en la 70/71, sólo que esta vez el verdugo fue el Eskisehirspor turco. Parecía que el decano de la capital hispalense no terminaba de arrancar en competiciones continentales, cayendo casi siempre en primera ronda. No obstante, esta dinámica negativa se rompió por fin en la campaña 82/83 de la mano de Manolo Cardo. En esa ocasión se llegó a octavos, después de dejar en la cuneta al Levski Spartak y Paok de Salónica y caer ante el Kaiserslautern alemán. Al año siguiente otra vez se disputó la UEFA, aunque no con la misma suerte, pues otra vez se cayó a las primeras de cambio. Fue ante el Sporting de Lisboa en un emocionantísimo partido de vuelta que se torció en el descuento con un desafortunado gol en pleno descuento.
De ahí a la 90/91, cuando el Sevilla de Tony Polster se consolidó como una auténtica pesadilla del Paok de Salónica, dejándole fuera de la UEFA en treintaidosavos de final en una tanda de penaltis inolvidable, tras empatar ambos encuentros a cero. Luego el Torpedo de Moscú echó a los hispalenses con un 3- 1 en el choque de ida, que fue imposible remontar en el Pizjuán. El 2- 1 se quedó demasiado corto.
Para la siguiente participación en la copa de la UEFA hubo que esperar cinco años, en la temporada 95/96. El gol de Suker en el Pireo todavía hoy es venerado por muchos. En la primera el conjunto andaluz se deshizo del Botev Plovdiv búlgaro. Después mordió el polvo el Olimpyacos, merced al inolvidable lanzamiento de falta del croata. En octavos, el Barça de Cruyff se encargó de arruinar el sueño de por fin entrar en cuartos de final.
Hasta esa fecha el Sevilla había disputado 30 encuentros. Pero en las dos últimas temporadas el crecimiento ha sido apabullante. El año pasado el conjunto hispalense entrenado por Joaquín Caparrós llegó hasta octavos, disputando diez encuentros. Nacional, Alemania Aachen, Zenit, AEK Atenas, Lille, Panathinaikos y Parma fueron los contrincantes. Los italianos acabaron con un bonito sueño que a día de hoy está en punto muerto.
En la 05/06 se ha conseguido llegar a octavos y de momento se puede lograr superar esa barrera histórica de cuartos siempre que se remonte el 1- 0 adverso encajado en tierras galas. Eso sería en el partido número cincuenta, una histórica cita, se mire por donde se mire.