
El día 4 de Agosto, (sábado) comenzó, el primer besamanos vespertino, a la Virgen de los Reyes, para continuar el último día de besamanos, la mañana del día 5 de Agosto,(Domingo) para dar comienzo a los cultos a la Patrona de la Archidiócesis de la Capital Hispalense. Para su encuentro con los Sevillano, las hermanas de la cruz, (camarera de la virgen), han decidido que la patrona de la archidiócesis estrene una nueva saya, realizada en los talleres de Mariano Martin Santoja y que ha sido donado de forma anónima. Los cultos continuaran ya el lunes día 6 con la celebración de la novena matinal a las 8 de la mañana y vespertina a las 20´30 horas, en el altar del jubileo de la Catedral, la entrada será por la puerta de los palos. El encargado de predicar la novena de la patrona de la archidiócesis de Sevilla, es el Arzobispo de Sevilla, Monseñor Juan José Asenjo Pelegrina. La Virgen de los Reyes lucirá en su salida anual del próximo 15 de Agosto (miércoles festividad de la Asunción), el manto de tisú color salmón, bordado en seda de Oro por las hermanas de la cruz (que son sus camareras y encargada de alternar sus mantos), con tela regalada por la Duquesa de Osuna, en el año 1929, estrenándolo ese mismo año con motivo del congreso mariano. El 2007 es la última vez que la virgen lució este manto en la procesión agosteña. La Virgen es una obra realizada en el segundo cuarto de siglo XII, siendo la imagen una representación plástica del concepto medieval de la realeza de María, derivada posiblemente de modelos franceses de su época, la talla mide 1´76 metros, el rostro apenas se muestra esbozado, los rasgos de la nariz son de poco relieve, los labios ligeramente marcados, con candorosa sonrisa y los ojos pintados, las manos son largas y elegantes, 21 centímetros, muy simple de modelado y en forma medieval de peine. La imagen del Divino Infante, que mide 60 centímetros y aparece en la rodilla de la Virgen de forma central, es posterior a la señora. La Virgen de los Reyes, fue una donación a San Fernando de su primo Luis IX, rey de Francia, hecho que parece apoyarse en las antiquísimas zapatillas que calza la Virgen en las que se observa la flor de Lis bordada, emblema de la casa Gala. Felipe II le puso el apelativo de Reina de las imágenes de Ntra. Sra.

