Cientos de personas, entre ellos su familia y amigos, se han acercado este lunes para recibir en el Aeropuerto de San Pablo de la capital de Andalucía a la regatista del Náutico Sevilla Marina Alabáu, ganadora de la medalla de oro en la clase RS:X en los Juegos Olímpicos de Londres. La windsurfista sevillana fue recibida a lo grande por una nutrida delegación del Club, que con cánticos, banderas, una pancarta y flores esperaba ansiosa para ver, abrazar, ovacionar, fotografiarse e incluso mantear a la flamante campeona olímpica. Pero el momento se hizo de rogar, en primer lugar por haber extraviado una de sus maletas y por el posterior requerimiento de los numerosos medios de comunicación que se dieron cita para recoger in situ las primeras palabras en suelo español de la primera campeona olímpica del deporte sevillano.
Alabáu, que se fundió en un emotivo abrazo con sus padre y su hermana mayor, Sara -la pequeña de la saga, Blanca, se ausentó al disputar desde hoy en Holanda el Mundial juvenil de la clase Techno-, se mostró "muy contenta" y aseguró que esta medalla no la había pillado "por sorpresa", ya que considera que estaba muy preparada. "Creo que es la primera medalla de oro de una sevillana, lo que me hace estar más feliz. No me ha pillado por sorpresa conseguir el oro porque iba muy preparada. Cuando me sentí más nerviosa fue el penúltimo día, pero estaba nerviosa por ganar", sentenció.
Además, se ha mostrado especialmente orgullosa de que la mayoría de las medallas la hayan conseguido mujeres y ha subrayado que el cierre este domingo de los Juegos Olímpicos fue "muy emocionante", algo a lo que suma la despedida de sus compañeros, que "han sido un grupo fabuloso que se ha apoyado mutuamente".
La hispalense ha puesto en valor las llamadas de apoyo que ha recibido, como la de la Casa Real, el tenista Rafael Nadal, "un referente en el deporte"; o los Príncipes de Asturias, además de sus hijas, con las que habló "un buen rato". Sin embargo, la llamada que más la emocionó fue la de su hermana pequeña, que no pudo viajar a Londres al estar preparando el Mundial de su categoría.
La campeona olímpica, que cumplirá a final de mes 27 años, también tuvo tiempo de referirse a las gestiones del presidente de RFEV para que en los Juegos de Río de Janeiro pueda disputarse la modalidad de windsurfing en lugar del kitesurfing. "Me ha dicho que hará lo posible por solucionarlo y que en noviembre tendremos noticias", ha explicado, aunque ha matizado que si no le dan "la oportunidad" lo tomará "como un nuevo reto", en alusión al kitesurfi "Como está todo un poco en el aire, no sabemos qué pasará en el futuro", ha agregado antes de posar con todos los que lo solicitaron en San Pablo.