Hoy 29 de octubre, memoria o festividad litúrgica del Beato Miguel Rua, primer sucesor de San Juan Bosco, la gran Familia Salesiana lo celebra con esa gran sencillez y humildad que han heredado, de Don Bosco su fundador y que perpetúan en sus sucesores y en todos y cada uno de los miembros de la Sociedad San Francisco de Sales.
Nosotros nos unimos a esta celebración, rindiendo también un sencillo pero sincero homenaje al Beato Miguel Rua y que mejor que hacerlo con unas maravillosas fotos de su época y profundizando en las raíces de la ejemplar Congregación Salesiana.
Miguel Rua, nace en Turín el 9 de junio de 1837, en el seno de una familia numerosa, siendo el 9º hijo, con tan solo 15 años, es decir en 1852, entra en el Oratorio de Valdocco, como uno de los primero muchachos y tras iniciar su formación, apens han pasado dos años, Don Bosco, un hombre ilusionante y de futuro, le dijo un día Nosotros dos haremos todo a medias. Y en efecto, Miguel Rua, estuvo entre los primeros a quienes el fundador de la obra salesiana le propuso la Sociedad Salesiana. Durante 36 años fue su fiel y el colaborador más íntimo en todas las etapas del desarrollo de la Congregación Salesiana. Hizo su ProfesiónProfesó en 1855.
Se convirtió en el primer Director Espiritual de la Sociedad a los 22 años (1859), sacerdote en 1860, primer Director del colegio de Miravello a los 26 años (1863- 1865), Vicario de Valdocco, ya con 700 alumnos y de la Sociedad, fue administrador de las "Lecturas Católicas", encargado de la formación (1869) y del personal. Director General de las Hijas de Mª Auxiliadora (1875), acompañaba a Don Bosco en sus viajes...
Por una explícita petición de Don Bosco, en 1884, S.S. El Papa León XIII lo destinó a suceder a Don Bosco y lo confirmó Rector Mayor en 1888.
Considerado como "regla viviente" por su austera fidelidad, Don Rua mostró una paternidad llena de delicadezas, tanto que fue definido "un soberano de la bondad".
Con el aumento de los hermanos y el desarrollo de las obras, envió a los salesianos por todo el mundo cuidando en particular las expediciones misioneras.
En los largos viajes realizados para visitar las obras salesianas en Europa y en Oriente Medio, confortaba y animaba, siempre apelando al Fundador: "Don Bosco decía... Don Bosco hacía... Don Bosco quería..."
Cuando murió, el 6 de abril de 1910, a los 73 años, la Sociedad había pasado de 773 a 4.000 salesianos, de 57 a 345 casas, de 6 a 34 Inspectorías en 33 países.
Beatificándolo, S.S. El Papa Pablo VI afirmó: "La Familia Salesiana ha tenido en Don Bosco el origen y en Don Rua la continuidad Él ha hecho del ejemplo del santo una escuela, de su regla un espíritu, de su santidad un modelo. Ha hecho del manantial un río". Sus restos se veneran en la cripta de la Basílica de Maria Auxiliadora.
Os ofrecemos una serie de fotos suyas años 1891- 99, y también otras del día de su Beatificación por el S.S. Papa Pablo VI, Sirva esta publicación, como un sencillo pero sincero homenaje al Beato Miguel Rua y como no a todos los 498 nuevos Beatos que ayer fueron proclamados y a toda la Gran Familia Salesiana que siguen el camino marcado por San Juan Bosco, el fundador de esta gran congregación religiosa que, a Dios gracias, se extiende por el mundo entero.