El escritor jerezano Martín Ángel Piñero Romero firmará su divertidísimo diccionario de humor "Diccionario ...O cómo dar mil y pico patadas a la R.A.E.. Editorial DALYA. EN EL CORTE INGLÉS DE JEREZ . EL SÁBADO 24 DE JUNIO A PARTIR DE LAS 19.00 HORAS.
El libro está dedicado al gran humorista español desaparecido José Luis Coll.
Llega para beneplácito de sus muchos seguidores y buenos amantes de la literatura de humor.
Este Sábado 24 de Junio a partir de las 19.00 horas, el escritor jerezano Martín Ángel Piñero Romero firmará su conocido diccionario de humor " Diccoñario ( ...o cómo dar mil y picos patadas a la R.A.E. )" en El Corte Inglés de Jerez en la Sección de Libros.
Uno de los libros más exitoso de humor: El Diccionario de Humor "Diccoñario ( ...o cómo dar mil y pico patadas a la R.A.E.)" ( editado por la editorial Dalya) del escritor jerezano Martín Ángel Piñero Romero. Se ha convertido en una de las grandes revelaciones del género.
Durante años, Martín Ángel Piñero se ha dedicado a la ardua tarea de crear, transformar e inventar palabras con un objetivo único: divertir. Con palabras inventadas y gran sentido del humor, el autor ha construido este Diccoñario para que el lector pase un rato estupendo con la lectura de definiciones, tales como:
AUTÓMONO: Simio que trabaja por su cuenta; se puede llevar toda la vida trabajando para que después no cobre ni el paro.
COPILATO: Acompañante del conductor de un vehículo que lleva siempre consigo un recipiente con agua y jabón por lo que pudiera suceder.
MISURRO: Ruido suave que provoco al hablarme a mí mismo con un tono tan bajo que prácticamente no me oigo.
SECRETORIA: Administrativa que trabaja para su jefe pero nadie lo sabe.
Nadie como el recordado José Luis Coll hubiera comprendido la forma en que Martín A. Piñero embarulla y tergiversa las palabras. En la estela del maestro, su Diccoñario encierra todo tipo de humor y muchas formas de resaltar el lado cómico de la vida.
Martín Ángel piñero Romero: «Mi nombre es Martín y me llamo… exactamente igual. Nací en Jerez de la Frontera allá por 1967 (no calculéis: ¡Tengo 49!). Aunque mi trayectoria profesional anda en estos tiempos por otros derroteros, siempre he tenido presente el humor como forma de entender la vida. Siendo niño, y más bajito que ahora incluso, ya escribía guiones de humor para el dúo que formaba con mi amigo Mario para actuar en el Colegio o en las fiestas de “El Pellizco”, nuestro barrio. Varias colaboraciones en la revista del instituto y otros leves encuentros con un papel en blanco me hicieron creer en el humor como forma de decir lo que uno piensa pero de una forma diferente. Ahora, esas inquietudes por la literatura, tienen como fruto la publicación de este diccionario. Amenazo seriamente con volver en esta u otras disciplinas escritoras, ya que me he divertido muchísimo “destrozando” nuestro castellano. Para mí hay muy pocas cosas tan gratificantes como hacer reír, y espero haberlo conseguido».