El Halcón Avenida afronta el esperado partido de vuelta con una renta muy alta, mayor de lo deseado. Las españolas no supieron hacer frente a la férrea defensa del Spartak de Moscú, un equipo que demostró ser mucho más que un simple grupo de grandes (grandísimas) individualidades. En campo defensivo, las rusas anularon por completo a sus rivales durante periodos largos de tiempo, de manera que las salmantinas se quedaron sin anotar durante 4 minutos en el segundo cuarto (lo que propició la escapada del Spartak previa al descanso) o sólo fueron capaces de meter 8 tantos en todo el tercer cuarto, lo que hizo temer por la eliminatoria entera.
El Halcón Avenida debe valorar al máximo la reacción final. De haber tirado la toalla en el sprint final, probablemente este encuentro de vuelta hubiera tenido más de trámite que de fe ciega. Teniendo en cuenta que las Leslie, Fröhlich y compañía llegaron a contar con 23 puntos de ventaja, suena a gloria el parcial de los últimos minutos (5- 12). Suena a gloria y también a ejemplo de lo que puede lograr el equipo mañana en Wúrzburg, un pabellón al que el Ayuntamiento charro se ha visto abocado a colocarle gradas supletorias. La ciudad se ha volcado de lleno con la cita de sus chicas favoritas y presentará un lleno absoluto. Cerca de 3.700 personas crearán lo que ya se ha venido a llamar el infierno de Würzburg para alentar y empujar a unas jugadoras que necesitan el apoyo continuo en los buenos y en los no tan buenos momentos para creer que esos 16 puntos no están tan lejos como parecen.
Detener a Fröhlich y Leslie es una tarea complicada, puesto que la calidad individual que atesoran es enorme. Sí parece algo más factible parar la producción anotadora de Ticha Penicheiro, que sorprendió a propios y extraños marcándose una actuación cercana al triple- doble (18 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias). La portuguesa no se caracteriza excesivamente por ser una gran tiradora, por lo que parece más sencillo frenarla a ella que no al dominio interior de Leslie o a los tiros exteriores de Fröhlich. La internacional alemana no puede repetir bajo ningún concepto el 4/6 en triples que tanto machacó al Halcón Avenida, aunque no en la medida de las 18 pérdidas (seis de ellas casi consecutivas en el fatídico tercer cuarto por pases defectuosos). La defensa, pues, de las españolas está obligada a rayar la perfección, a no dejar margen de maniobra ni a las estrellas más rutilantes ni a las que cumplen un papel menos vistoso (ojo con Robinson y Grubin). Por su parte, el ataque charro debe tratar de repartirse más, por lo que jugadoras con un protagonismo ofensivo secundario tendrían que estar preparadas para la acción en caso de que el Spartak se cierre en exceso sobre Tornikidu y Schumacher. Nuria Martínez tendrá su segundo asalto en el duelo particular de directoras con Penicheiro. La portuguesa no es una gran defensora, así que por ahí podría desangrarse el conjunto dirigido por Vadim Kapranov.
Tampoco debe obcecarse el conjunto salmantino en enjugar la brecha en muy poco tiempo. Fernando Merchante, que ya protagonizó una remontada parecida ante el Messina cuando dirigía al entonces apellidado Halcón Viajes, aboga por ir limando la distancia de manera paulatina y asestar el golpe definitivo en los minutos postreros del encuentro, sin dar lugar a la reacción rival. Su experiencia puede servir como método, pero el camino hacia el sueño posible de la remontada tiene millones de sendas diferentes hacia la meta deseada: la final de la Eurocup.
Semifinales de la Eurocopa (Partido de vuelta):
Halcón Avenida - Spartak de Moscú
Día / Hora: Jueves 2 de marzo / 20:30
Pabellon Wurzburg de Salamanca