Entre los jugadores del Caja San Fernando que más han sufrido este año la irregular trayectoria deportiva del equipo se encuentra un canario con alma sevillanizada. Carlos Cazorla, uno de los dos capitanes junto a Raúl Pérez, llegó a la entidad en los albores de la temporada 2002- 03 y la pasada campaña renovó su contrato hasta junio de 2008.
Tras la crucial victoria del jueves frente al Akasvayu Girona, el cuadro de Manel Comas está virtualmente libre de cualquier complicación en la zona baja y el escolta lo celebra con satisfacción sabiendo las dificultades vividas en un atípico ejercicio liguero: Estábamos en una dinámica de la que era muy difícil salir, pero el equipo ha respondido y ha sabido salir adelante. Al perder ante el Ricoh Manresa tuvimos un pequeño bajón, aunque hemos conseguido sobreponernos y ahora sentimos una alegría tremenda aunque aún no podemos cantar victoria porque no estamos salvados matemáticamente.
Pese al alivio propiciado por el gran partido ante el potente equipo catalán, Cazorla aboga por mantener el nivel de juego y seguir compitiendo, en primer lugar por la tranquilidad de certificarlo de forma matemática y, después, por que relajarse supondría sucumbir de antemano ante un rival como el vitoriano: Si vamos a Vitoria a ver qué pasa, el Tau nos va a pasar por encima. Ellos son un grandísimo equipo y será complicado ganar. Aun así, tenemos que competir; es importante que juguemos con intensidad y estemos siempre en el partido. Ante el Akasvayu Girona tuvimos momentos defensivos muy buenos y eso es importante, porque la intensidad defensiva nos da opción de victoria. Si nos ganan, que lo hagan porque son mejores, pero no porque nosotros les facilitemos las cosas.
El domingo (19.00 horas, Pabellón Fernando Buesa Arena) vuelve a la que fue su casa deportiva y donde coincidió por primera vez (luego lo haría en Fuenlabrada y brevemente en el Caja San Fernando) con el técnico baskonista Velimir Perasovic: Tengo muy buenos recuerdos de Vitoria, ya que me seleccionaron con 14 años, me hicieron debutar en la ACB y siempre me han tratado con cariño. Es especial para mí ir a Vitoria, pero una vez que estoy en la cancha intento dar lo mejor sabiendo que el Tau es un hueso duro de roer. Después, les deseo lo mejor. Sólo he ganado allí en Vitoria una vez, con el Fuenlabrada, y creo recordar que después de ir a la prórroga. Es un campo muy difícil, por el potencial del equipo, por la afición que aprieta mucho... Pero si ganamos será una gran alegría, no porque le ganemos al Tau, sino porque estaremos matemáticamente salvados, que es lo que importa, ha añadido. Por su conocimiento de las estructuras e idiosincrasia del Tau, sabía que no acusaría el varapalo de la Final Four de la Euroliga en Praga: Todos pensaban que el Tau vendría cabizbajo, pero han demostrado que son un equipo grande que se repone de los momentos difíciles, y así le ganaron al Etosa Alicante. Son capaces de superarse, por eso están arriba. La primera premisa es que nosotros estemos bien, y luego, si ellos tienen un mal día, mejor.
El escolta canario considera que ahora mismo lo importante de la victoria ante el Akasvayu es que dependemos de nosotros mismos. Una victoria más y estaremos matemáticamente salvados. Cuando te ves sufriendo todo el año surge la frustración, hay momentos de desesperación... pero ayer dimos un paso enorme hacia la salvación y eso te alivia. De la misma forma, valora el trabajo de todo el club para superar la mala racha deportiva: Todos los compañeros y la afición hemos dado un paso al frente para sacar esto adelante. Desde el presidente al utillero, todos nos han apoyado y han puesto ese granito de arena que es tan importante. El equipo ha reccionado porque sabíamos que nos jugábamos muchísimo y hemos sacrificado objetivos personales por el equipo. Todos estamos mentalizados en que el equipo es lo más importante, todos trabajamos para sacar esto adelante. Son dinámicas de las que hemos conseguidos salir con trabajo. Eso es algo por lo que ha pasado todos los equipos que están abajo, como el Lagun Aro o el Ricoh Manresa, lo que deja patente que esta es una liga muy igualada y se demuestra el gran nivel que hay, ha sentenciado.