Era duda para el encuentro ante la Alemania de Nowitzki, pero Juan Carlos Navarro no sólo salió en el quinteto inicial sino que, con 15 puntos en los primeros veinte minutos, fue junto a José Manuel Calderón los estiletes de la Seleción Española. Tras el descanso, las rotaciones y a un Pau Gasol con muchos minutos de descanso han conseguido aumentar la distancia hasta los 21 puntos. Con esta victoria España domina el Grupo B con tres victorias junto a la sorprendente Angola, con la que se jugará el primer puesto del grupo el próximo miércoles.
El partido de esta fase, el que todos esperábamos, el España- Alemania, se resolvió por un contundente 92 a 71 Las dudas se resolvieron pronto. Había dos. La primera si jugaría Navarro se resolvió muy pronto: salió de titular y anotó tres triples prácticamente de salida. Definitivamente, el escolta había superado sus dolores en el talón. La segunda duda era el partido en sí mismo. Ésta tardo un poco más en resolverse, pero no mucho tampoco: España fue netamente superior a Alemania y sólo en los primeros compases y en el minuto tres, cuando Pau Gasol se cargó ya con la segunda personal, los alemanes se pusieron arriba; el resto del partido sólo pudieron ver a los españoles por delante. Y ya a partir del tercer cuarto, escandalosamente por delante. La temprana marcha de Pau al banquillo no influyó en absoluto en la marcha del mismo. Navarro y Calderón, ¡qué excelso partido el suyo!
Mantuvieron a la selección nacional por delante; si no cómodamente, sí con cierta solvencia. El base mandaba, defendía y anotaba. ¡y de qué manera! Seis de seis en tiros de dos al descanso. Luego lo aderezaría con algún triple para llegar al final del encuentro como máximo encentador, con 20 puntos.
¿Y Nowitzki? Bien defendido, gracias. Por Garbajosa y por Jiménez. Y también por todos, porque la defensa española fue sencillamente magistral. Variada (hubo zonas press, de ajuste, mixtas, con 4 y 1, individuales asfixiantes, en un alarde táctico de Pepu Hernández) desquiciante para el rival y motivante para el equipo, que robaba y corría en le segundo tiempo cuando a los alemanes se les fundieron los plomos a la estrella de los Mavs sólo sabía protestar. Se quedó en 14 puntos, por debajo de Pau Gasol, que metió 16 e incluso ni siquiera fue el mejor anotador alemán. Alemania no sabe vivir sin él y cuando el entrenador le quiso dar un respiro, el equipo lo notó tremendamente.
España dominaba el marcador al descanso por 48 a 41, con tan sólo 7 minutos de Pau. Dieciocho necesitaron los alemanes a Nowitzki y todo para perder por siete. Peor le irían las cosas luego, cuando la defensa española se hizo agobiante y las manos de los españoles cortaban un tanto por ciento elevadísimo de los balones que intentaban pasar los germanos a su estrella.
Horadados en su moral y los nuestros cada vez más convencidos de su superioridad, el partido se fue hasta otro escenario muy distinto al que todos pensábamos desde que se realizó el sorteo: el de la exhibición española ante unos atolondrados rivales. Las dudas se habían despejado ya hacía tiempo.
ESPAÑA, 92 (26- 22- 24- 20): Pau Gasol (16), Rudy Fernández (7), Carlos Cabezas (0), Juan Carlos Navarro (19), José Manuel Calderón (20), Carlos Jiménez (4), Sergio Rodríguez (2) Berni Rodríguez (2), Marc Gasol (3), Àlex Mumbrú (5) y Jorge Garbajosa (15).
ALEMANIA, 71 (22- 19- 19- 11): Demirel (0), Okulaja (4); Schultze (2), Garrett (7), Herber (10), Hamann (4), Green (14), Roller (7), Grunheid (0), Femerling (9), Nowitzki (14) y Jagla (0).