C.D. ONCE-ANDALUCÍA, 84 (16-20-23-25) CID CASA MURCIA GETAFE, 54 (13-11-14-16)
Sábado, 6 de marzo de 2010. CRE Luis Braille. Sevilla. 18:00 hs. 15ª jornada de la 41ª Liga Nacional de División de Honor, 21º Trofeo Fundación ONCE
Equipos: C.D. ONCE-Andalucía: Cinco inicial: 5 De Paz 4, 7 Ruiz 3, 9 Pollock 13, 11 Latham 23 y 8 Pablo Zarzuela 16. 6 Beiro 0, 12 Alejandro Zarzuela 11, 13 Sánchez 9 y 15 Navarro 5.
CID Casa Murcia Getafe: Cinco inicial: 4 Berisa 9, 6 Martin 6, 12 Medina 12, 17 Walley 10 y 18 Quevedo 4. 5 González 0, 7 García 2, 8 Agea 2, 9 Pérez 2, 11 López 2, 14 Vera 5 y 15 Soria 0.
Árbitros: Gómez (Barcelona) y González (Sevilla).
El C.D. ONCE-Andalucía ha restañado algunas de las heridas que le provocó la derrota del pasado sábado en Valladolid ante el Fundación Grupo Norte. Al menos, tras el varapalo sufrido en tierras pucelanas, el compromiso de hoy ante el CID Casa Murcia Getafe había adquirido un valor añadido, ya que a la obligatoriedad de vencer a un rival supuestamente inferior había que unirle la necesidad de no volver a tropezar en la carrera hacia el título liguero, toda vez que los errores ya no están permitidos, y otro en la tarde de hoy hubiera activado las alarmas.
Pero la lógica se ha impuesto, y los de Matteo Feriani han vencido holgadamente a un voluntarioso CID por 84-54. Y eso que en los prolegómenos del partido no se dejó de hablar de ese diabólico emparejamiento que el sorteo de la Copa del Rey ha deparado para los cuartos de final, al unir en la primera eliminatoria al C.D. ONCE-Andalucía con el C.D. Fundosa Once en una final anticipada. Pero lo trascendente hoy era vencer al CID y mantener el pulso liguero con el equipo capitalino y con ese Funhpaiin revelación que se encuentra al acecho en la tercera plaza.
El equipo auriverde salió decidido a resolver por la vía rápida y a amedrentar a su enemigo. Un parcial de 6-0, logrado con tres canastas de dos del australiano Latham, hizo presagiar que la contienda iba a ser un paseo para los andaluces. Pero no fue así. Ni mucho menos. Por lo menos en la primera parte. Una canasta muy oportuna de Agustín Berisa rompió la racha local, y a partir de ahí se vivió un bonito pulso entre un equipo que dominaba en el electrónico y otro que peleaba porque ese control no fuese tan exagerado como las diferencias clasificatorias podían hacer pensar.
Al final, las distancias fueron aumentando, con un Once que jugaba a un ritmo inferior al habitual y un CID que ha venido a Sevilla a jugar, a divertirse y a ofrecer una imagen bastante positiva a pesar de esos 30 puntos que le ha sacado el todavía líder de la División de Honor.