El exjugador y entrenador croata, Aleksandar Petrovic continúa su peregrinación hacia Santiago de Compostela y, esta mañana, ha puesto rumbo a Pontevedra, final de la segunda etapa.
En esta jornada, ‘El Camino acaba en Obradoiro’ tenía preparados a dos invitados muy especiales para el protagonista: Benito Doblado y Raúl Pérez, exjugadores del, por aquel entonces, Caja San Fernando de Sevilla que él entrenó en su etapa en la Liga Endesa.
Tras este reencuentro veintitrés años después de que se separasen sus caminos, el grupo ha comenzado la segunda etapa, que terminaría en Pontevedra. El primer alto en el camino fue el Concello de Redondela, ante el Albergue de peregrinos Casa da Torre. Allí les recibieron el alcalde de la localidad, Javier Bas, la concejala de Turismo y Deporte, Teresa París, y el director de la oficina de Correos de Redondela, Leonardo Cabaleiro.
Antes de continuar con su camino por la Vía Romana XIX, Aza visitó la oficina de Correos para sellar su credencial con el matasellos personalizado para el Camino Portugués. Y no ha querido irse sin enviar una postal a su hija a Croacia, para felicitarla desde Galicia por su próximo compromiso matrimonial.
Dejando atrás Redondela, el grupo se aleja del núcleo urbano y se adentra en una zona más boscosa, repleta de pinos que rodea el alto de la Lomba con unos maravillosos paisajes. A partir de este momento, comienza el descenso y la expedición descubre las vistas de la ría de Vigo desde lo más alto.
Así, el protagonista alcanza Arcade, capital de la ostra en Galicia, hasta llegar a Pontesampaio. El grupo cruza este puente medieval, que muestra diez arcos con bóveda de perpiaño, para realizar una parada rápida en la playa fluvial, ya en el Concello de Pontevedra.
El protagonista, fiel amante de la naturaleza, se queda fascinado con los siguientes kilómetros a pesar de las subidas, adentrándose en Vilaboa. Aza recorre caminos estrechos y empedrados, cruzándose con el río Tomeza, para volver a entrar en el término municipal de Pontevedra.
El grupo alcanzó el final de la etapa según lo previsto y con mucha alegría ante la iglesia de la Peregrina, en el casco histórico, un santuario basado en el arte neoclásico y barroco, en el que su planta cuenta con forma de vieira. Hasta allí les acompañaron el presidente de la Cofradía de la Peregrina, Ignacio Landín, y el presidente de los Amigos del Camino Portugués de Santiago, Tino Lores.
Por la noche, todos los integrantes descubrieron el maravilloso puerto de Combarro, donde han disfrutado de una fantástica velada en el restaurante Tinta Negra.